Esta noche ceno con la pandilla en un italiano pequeñito. Y para no romper la tradición de ser la más transgresora, he escogido un baby-doll con estampado en zig zag a rayas rojas y negras, algo punk, con sueter negro debajo, leggins negros, ojos ahumados, labios rojos -pero discretos- las uñas de negro, y mis tacones de calaveritas y tachuelas.
Las fotos no son demasiado buenas, pero qué quereis, yo no soy mi chico...
1 comentario:
Madre mia que blog mas triste, nunca vi un blog tan vacío de contenido y tan superficial, pero nada, si eres así...
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