EL CASO DEL POLLO FRITO -otra de lsd casero-

Hay dependientes y dependientes.



Esa es la conclusión a la que he llegado después de leer vuestros comments en el post anterior.

Susana sostiene, no sin cierta razón, que a veces parece que antes de contratar a un dependiente se le hace una prueba para ver lo borde, inepto y mal encarado que puede llegar a ser, y el caso es que, leyendo su comment, me acordé de una etapa en mi vida en la que sostuve con ahínco la teoría de que, en una conocida cadena de comida rápida, sólo contrataban idiotas, pero idiotas de los de verdad, de los de caso clínico diagnosticado. Nada de tontos a medio hervor. Idiotas profesionales.

Toda esta teoría se fundamentaba, básicamente, en una traumática experiencia que tuve que pasar, allá a finales de los 90, en mi exilio voluntario en Madrid.

Aquel fin de semana mis padrinos y mis ahijados se habían desplazado hasta allí para hacernos una visitilla, y después de una tarde de turismo al más puro estilo Díaz (es decir, medio día en Ikea y el otro medio por la calle Sol), estábamos en el salón de mi primera casa madrileña, en la calle José Abascal, tirados en el sofá y decidiendo qué cenar.

En ese momento, mi primo Nicolás comenta que a él lo que de verdad le apetece es pollo frito. Acababa de estrenarse el Episodio I de la Guerra de las Galaxias, de la que Nico era fan incondicional, y esa misma tarde habíamos pasado por delante de una famosa cadena de fast food que anunciaba que, con cada menú grande, regalaba un muñequito de la famosa saga.




Sabiendo que lo que el niño quería no era el pollo, sino al “pollo” de plástico y su espada láser, el que entonces era mi novio y yo nos ofrecimos voluntarios para coger el metro y acercarnos hasta la famosa cadena.

Al llegar una enorme cola de amantes del pollo frito y de las espadas láser se cernía sobre el mostrador. Esperamos pacientemente nuestro turno mientras nos leíamos el tríptico publicitario –que aún conservo- en el que anunciaban que “con cada menú, una figura de regalo”.




Cuando nos tocó el turno, y en vista de que éramos 7 personas a cenar, nos decantamos por el menú en tamaño gigante. Pollo frito picante, una coca-cola de tamaño industrial y miles de patatas fritas recalentadas y blandurrias. Pagamos, nos lo metieron en una bolsa de plástico, y cuando salíamos del local se me ocurre mirar dentro… allí no había muñequito alguno. Ni la menor sombra de espada láser.




Me acerqué al mostrador creyendo que se trataba de un olvido. A continuación reproduzco la conversación.

Mira, perdona, es que no habéis puesto el muñeco

¿Qué muñeco?

El de la promoción, el que regaláis con el menú.

Ah, es que no es con este menú. Es con el menú infantil.

Perdona, pero en la promoción no dice nada del menú infantil, sólo dice “menú”.

Ya, pero es con el infantil.

Bueno, y, ya que este menú es bastante más caro, ¿no podrías dármelo?

No, es que es con el infantil

(Aquí yo ya echaba humo por las orejas y G. se descojonaba, todo al tiempo).




Bueno, está bien, en ese caso, cóbrame un menú infantil y dame el muñequito sólo.

No, es que si te lo cobro te lo tienes que llevar.

Mira, yo no quiero más pollo frito. Con el que tenemos aquí podemos dar de comer a media Etiopía. Sólo quiero el muñeco. Si no hay más remedio, te pago el menú, pero no me lo quiero llevar.

Es que si lo pagas te lo tengo que poner.

Bueno, pues tú me lo pones y se lo das a los pobres de la puerta.

Es que te lo tienes que llevar.

(En ese momento noto que me empiezo a poner verde, y decido parar para respirar hondo de nuevo).



Está bien, está bien. Pues ponme un menú infantil.

¿Con qué lo quieres?

Con muñequito.

Y de comer.

Me da lo mismo, sólo quiero el muñequito.

Ya, pero es que si no me dices cómo lo quieres no te lo puedo poner.

Pues ponlo como quieras.

Es que tienes que escoger

(Madremiademividaloquehayqueaguantar)

Pues ponme una ración de pollo normal, coca-cola y patatas, ¡¡coño!!.

Son 750 pesetas
(sí, aún eran pesetas)

Toma, cóbrate (un billete de mil sale de mi cartera).

No tengo monedas de 50, espera.

El interfecto en cuestión se acerca al micro y pregunta a viva voz si alguno de sus compañeros tiene monedas de 50 para darme el cambio. Ninguno tiene, esto va de mal en peor. Empiezo a barajar la posibilidad de suicidarme haciéndome el haraquiri con la bandeja de plástico. En ese momento una tímida vocecilla se hace oir desde una caja vecina

Yo tengo de 25, si te valen

No, de 25 también tengo yo, pero necesito una de 50

Yo es que ya no me lo podía creer… ¿es que nadie le ha explicado a este ser extraño, inclasificable, descentrado, incoherente, que 25 + 25 son 50?




Completamente fuera de mi, me ensaño con una sarta de improperios impropios de la boca de una señora, que es lo que yo soy, lo mires por donde lo mires

Pero vamos a ver, dame 2 monedas de 25 y ya está, ¿no?

Y en ese momento, como si saliese de un trance, aquel ser completamente alienígena abre la caja registradora, saca dos monedas de 25 pesetas, y la vuelve a cerrar.

Perdona, pero es que faltan 200 pesetas. Te he pagado con un billete de 1000

Pero me dijiste que te diese dos monedas de 25

Sí, claro, pero no dije que no me dieses el resto de la vuelta

Pues es que ahora ya he cerrado la caja y no la puedo abrir hasta que no pague otro cliente

Desesperada, alucinada, y al borde del colapso, cedo el puesto a mis vecinos en la cola, que están directamente descojonados de la risa. Les explico el tema, me quedo pegada a ellos como una lapa, y alcanzo a impedir que el ser alienígena cierre la caja de nuevo justo antes de darme mis 200 pesetas.

Para cuando regresamos a casa, el pollo estaba frío, las patatas aún más reblandecidas de lo normal, y la coca-cola aguada… pero Dath Vader estaba intacto. Eso sí, Nico hubiese preferido a Jar-Jar. Cosas de niños.

38 comentarios:

ally fabulous dijo...

Qué gracia!. Me he reído mucho, a todos nos han pasado cosas parecidas en este tipo de establecimiento, a mí en el Mc Donald´s para que me den unas patatas normales y otras deluxe,...con decir que me metieron al final dos de cada (dos gratis, claro) con el lio que se hizo la dependienta...

En fin, luego dirán que sólo Indiana Jones vive aventuras trepidantes...

Un beso

Lara dijo...

jJJAJAJAJA madre miaa...me he reido muxo yo también!!!ombre lo del muñekito con el menu infantil es de toda la vida,es normal que no kisieran dártelo...xo tienes razón en que el xaval listico no era...jaja jaja.

MUAAAS

marta dijo...

Madre mia,... me pasa eso a mi y el elemento ese se como los 3 kilos de pollo frito pero con cajita y todo

Anónimo dijo...

Pero, ¿eso es verídico???? Ay, qué paciencia María, yo hubiese hecho una masacre,después de matar al susodicho personaje con grave retraso mental. O que te estaba mareando con toda la mala baba... Porque esa puede ser otra. Quizá están tan jartitos de trabajar por cuatro duros, con horarios espantosos y encargados subnormalísimos, que deciden pagarlo con el público. Y como no pueden chillarte, soltarte una mala contestación o similar, pues hacen ESTRICTAMENTE lo que tienen que hacer, aunque eso les lleve a parecer (y comportarse como) el hermano border line del autista Dustin Hoffman en Rainman.

Bicos,
Susana

Lol dijo...

Jajajaja!! pero eso ocurrió de verdad?? no, no puede seeeeerrrr!!! jajjaja! qué paciencia, madre mía! seguro que no eres la reencarnación atea del Santo Job??

Anónimo dijo...

Hola María:

Yo también creo que en estas cadenas ponen a gente un poco rozando el límite, porque si explicaramos todas las anécdotas, sería para hacer un libro... Sin ir más lejos el otro día en un Pastafiore de Barcelona pedimos tres menús y la dependienta nos pregunta si queremos TRES cubiertos (cosa normal, si pides tres menús, necesitas tres tenedores ¿no?) así que mi hermana y yo volvimos a la mesa (donde estaba mi madre esperando) con un complejo de gordas... supongo que no podía entender que dos personas puedan pedir por alguien que no esté necesariamente en la barra esperando...
También sería cuestión de hablar de las cajeras del DIA, o de según que dependientas de Zara, que parece que trabajan en Chanel...(ojo, que no digo todas)

ElPajarito dijo...

María darling, de verdad, no sé cómo lo haces, ¿de dónde sacas tanta paciencia? Lo de las cortinas fue pa morirse, pero esto ya es el colmo. Yo al dependiente en cuestión lo habría fusilado allí mismo, un guantazo por lo menos. Cabe subrayar que el encomiable trabajo que has hecho ilustrando el blog, me ha encantado volver a ver las monedillas de 25 pesetas, aunque fueron de las últimas en aparecer, eran geniales. De hecho llegué a tener en mi adolescencia un collar hecho de estas monedas. Bueno, que me voy pierdo por Albuquerque, que espectacular el post, espectacular la ilustración y más espectacular aún tu paciencia. ¿El primo Nico te ha llegado a compensar por semejante avatar vivido para conseguirle un puñetero Darth Vader?
Bss Mil,

ElPajarito

Vistiendo a Candela dijo...

jajajajajaja.
Que bueno Maria.
Estoy de acuerdo al 100% contigo, estoy segura de que en algunos establecimietos hacen la entrevista al revés, a ver quien es mas idiota e inepto.

Anónimo dijo...

SIEMPRE HE DEFENDIDO LOS ESTABLECIMIENTOS DE COMIDA RÁPIDA TIPO MAC, BURGER KIN...SU COMIDA GRASOS Y MEGA CALÓRICA ME HACE FELIZ DURAMTE UNOS INSTANTES, PERO LA VERDAD, CREO QUE ESTA VEZ SE HAN PASADO!!!. MARIA PIEDRAHITA

María dijo...

Ally, trepidante no sé, pero deseperante fue un rato!!

María dijo...

Lara, si yo no digo que en lo del menú no tuviese razón -aunque insisto en que aún tengo el folleto promocional, y ahí no sólo no pone nada de "infatil", sino que la foto es del gigante...- pero lo de las monedas ya fue demasiado "pal body"

María dijo...

Marta, tentada estuve, no te creas, pero creo que me contuvo pensar el volver a pasar por el trance de pedir de nuevo... uff

María dijo...

Susama, verídico y real como la vida misma.

Y menos aml que había testigos _G se acuerda como si hubiese sido ayer-, porque sino no me creería nadie... si es que parece ciencia-ficcion!!!

María dijo...

finaysegura: Job no creo, pero que tengo una parcelita ganada en el cielo, allí entre María Magdalena y Santa Ana, fijo, vamos

María dijo...

Jajajaja, Memis!!! jajajaja

Yo es que me cuentan las cosas y alucino... madre mia, qué fauna!!!

María dijo...

Elpajarito, muchas gracias por los elogios.

De verdad que luego en el fondo soy una persona muy poco paciente, pero con la gente "borde line" soy más tolerante... aunque, claro, todo tiene un límite!!!

María dijo...

Visitiendo a Candela: a ver si va a ser que no es una leyenda urbana...

María dijo...

Piii!!!!!!

Qué ilusión!!!

Señoras, señores, escuchen a la mujer que acuñó el término "de pin" para definir la ineptitud de un camarero... si es que de verdad que hay cada especimen...

Conste que yo tampoco tengo nada en contra de las cadenas fast food en sí... eso sí, si fuesen autoservicios me gustarían más.

Hahi dijo...

He vivido todo tipo de situaciones extrañas en esos mal llamados restaurantes de comida rápida, pero lo tuyo sobrepasa todo tipo de límites... jejejejeje Para morirte!!
Cuando yo estudiaba en Salamanca era costumbre sacar a las novatas de la residencia "de excursión" y hacerlas atracar el Burguer King con un paraguas a modo de pistola. (En nuestra defensa he de decir que éramos más buenas que el pan y las regalábamos un buen montón de patatas fritas al terminar.) Creo que cualquier persona normal que vea entrar a una veintena de niñas de 17 años con la cara pintada, un chupete colgando y una "L" con su nombre en la espalda entienda que se trata de una novatada (que por otro lado era de las más típicas), pero nosotras nos encontramos con el único tonto que apretó el botón de la alarma y preparó una tremenda. En fin, sacamos a nuestras novatas corriendo de allí y desaparecimos lo más rápido posible, pero estuvimos a punto de ir a la comisaría porque creyó que era de verdad!!!! Eso sí, no es comparable con lo tuyo ni de lejos!!
Muxus desde Bilbao

http://alfondodelarmario.blogspot.com

María dijo...

Jajjajjajajajjajaja insuperable María....

no tengo palabras de verdad...no tengo palabras...

tremendamiranda dijo...

júrame q todo eso es verdad, jajaja, júramelooo!!!!!

María dijo...

Dios mio, Hahi, lo tuyo es directamente de juzgado de guardia, jajajajaja

Lo veis, como son medio idiotas... ¿qué tipo de banda de atracadores peligrosísimos es esa formada por post adolescentes con paraguas y L en la espalda? ¿La versión Naif de Alex y sus amigos?

María dijo...

maría, sin palabras me quedé yo, de verdad

María dijo...

tremenda miranda, te lo juro. Y menos mal que tengo un testigo presencial a mano porque si no nadie se lo creería... si es que parece surrealismo puro, oye, que ni Buñuel!!!

Anónimo dijo...

Hola María, me he reído mucho, menudo personaje!!!
Además este comentario ha contribuido a que la persona más MACADICTA del mundo (que va por lo menos 3 días por semana),esté planteandose el volver.
Sabéis de quien hablo.... al menos algunos.
Por ello te agradezco enormemente lo que has escrito, ya que esa persona MACADICTA es mi mujer y por lo menos esta semana me salvo de ir al MAC.
GRACIAS;

María dijo...

Jajajaja, vaya, "anónimo", muchas gracias por los cumplidos!!! jajajajaja

No te preocupes, que volvereis a comer Mac algún día, seguro.

Si te soy sincera, tanto hablar de fast food me están entrando ganas a mi de comerme un Big Mac!!! jajajaja

Anónimo dijo...

Pobrecillos, quién va a querer trabajar allí?

Anónimo dijo...

¿Y no había ninguna cámara oculta? Qué paciencia hay que tener!

Anónimo dijo...

Vaya experiencia!jaja! Yo tengo un amigo que trabajó un tiempo en el Burguer King, y se estaba empezando a idiotizar, verdad verdadera. Él por suerte lo dejó a tiempo, pero hay gente que "se conforma con conformarse", y acaban aceptando las normas de esos sitios como auténticos autónomas. Según me contó él, tienen unos procesos de lo más estándarizado, y cuidado con saltarte algo. Por lo visto tú le rompiste los esquemas a una de esas autómatas. Y todo por los niños si es que...benditas criaturas.jaja

Anónimo dijo...

Ha sido un post divertidísimo!! Muy entretenido para empezar a trabajar un jueves de agosto. Gracias por explicarnos estas anécdotas tan bien!!!

En cuanto al tema, ya me imagino la cara que tendrías... a mí me ha pasado algo similar alguna vez y me entra un cabreo inmenso. Lo fuerte es que si voy con mi pareja, él no suele ni abrir la boca! y cuando le pido ayuda me dice que no la necesito que yo sola me sé "quejar y hacerme oir" la mar de bien!!!

Plum Sykes dijo...

Hola!
Apenas escribo pero leo todos tus post sin falta!
Tienes un premio enmi blog!

Thalía Calviño dijo...

¡¡¡¡JA JA JA JA JA !!! SÓLO PUEDO DECIR QUE ¡GRACIAS! PQ ME HE REÍDO MUCHO Y FALTA ME HACÍA Y POR OTRO LADO ATESTIGÜAR QUE OBVIAMENTE HAY BUENOS Y MALOS DEPENDIENTES / CAMAREROS. UNO MALO TE AMARGA EL RATO Y UNO BUENO PUEDE ALEGRARTE EL DÍA Y FIDELIZARTE. ¿ ACASO ES TAN DIFÍCIL UNA SONRISA Y ALGO DE CORTESÍA ? A MÍ NO ME HA PASADO NADA PARECIDO PERO PUEDO LLENAR MÁS DE UN BAÚL A BASE DE MALAS CARAS Y GESTOS. CUALQUIER DUEÑO DE UN LOCAL, DEBE ENTENDER QUE LOS CLIENTES IDENTIFICAN LO QUE ÉSTE VENDE CON QUIENES LO VENDEN = DEPENDIENTES /CAMAREROS, Y Q POR MUY BUEN PRODUCTO QUE OFREZCAS SI EL DEPENDIENTE NO ES AMABLE Y EDUCADO LA GENTE SE CANSA ¿ NO ?. A MIS CHICOS SIEMPRE LES DIGO QUE ANTES DE NADA VENDEMOS TIEMPO, PACIENCIA, CORTESÍA Y SI PUEDE SER SONRISAS... ¡ Y NOS VA DE MARAVILLA !

COMO SIEMPRE MUY BUEN ARTÍCULO MARÍA.

Ana M. dijo...

¿No habéis oído nuna que dan Subvenciones a las empresas por contratar a gente diagmos "con problemas"? (con todos mis respetos, por supuesto)

O es eso, o los humos que inhalan los empleados a fritanga les deja colocados...

Muy divertido!

Anónimo dijo...

Jajaja, cómo me he reído...
Desgraciadamente, dependientes al borde del encefalograma plano hay miles y siempre se cruzan en el camino de una. Yo el otro día la tuve con una de H&M a propósito de mi intención de ser ecológica no queriendo la bolsa de la tienda y su negativa. Al final me tocó llevármela y tirarla en la primera papelera que encontré. A la m... la ecología. Al menos me desahogué escribiendo un post sobre el tema. Esto parece terapia cajeril...
Besos.

Mattie dijo...

Buenisimo jajajaja, pero cuando te pasa y es el pan nuestro de cada dia, solo nos queda tener paciencia y humor si no estamos perdidos. Gracias por hacerme reir, saluditos.

ZEPETIT dijo...

Me has puesto una super sonrisa... Je, je, je... A todo el mundo le ha pasado algo de eso. Y laleyenda urbana de que las dependientas, temderas, cajeras, reponedoras de cierta cadena de supermercados son las mas bordes del mundo mundial... Adivina???

Zepequeña.

Mafalda dijo...

no me extraña que sacaras humo por las orejas!!! yo sólo de leer la historia, me he tenido que hacer una tila!!! lo peor que puede pasar es encontrarte a alguien con pocas ganas de hacer su trabajo!!! a mí me da un coraje....

aunqueyonoescriba dijo...

jjajajajaj y me quejaba yo de lo mío... creo que no me arrepiento de no haber comido nunca en esa cadena de restaurantes...