BÁSICOS IMPRESCINDIBLES

He repasado mis últimos post, y lo cierto es que he sido bastante “malvada”… casi todas las listas que he elaborado son de “Lo peor de…”.

En fin, el caso es que me he sentido tremendamente maligna y he decidido rectificar –sólo un poquito- el rumbo, elaborando una lista de…


LOS 10 BÁSICOS IMPRESCINDIBLES EN MI ARMARIO:

1.- UNOS JEANS: Que te sienten bien. Y aquí es donde reside el truco. Porque a priori comprarte unos vaqueros debería ser pan comido. Todas las tiendas del mundo tiene, cada firma diseña los suyos, y ni si quiera el precio es impedimento, porque en el mercadillo los encuentras a 5 €… pero es que dar que los jeans que se adapten a ti es como encontrar el santo grial… muchos lo han intentado, pero ninguno ha regresado.

Le teoría general es que ciertas firmas –Fornarina, Miss Sixty, Levi´s…- fabrican diseños que sientan mejor, pero, al menos en mi caso, esta teoría es errónea. Los he tenido caros, baratos, de firma y de mercadillo, y lo cierto es que los que mejor me sientan, hasta ahora, son los de Bershka de corte skinny, o los de Mango con el mismo corte. Los Levis 501 en oscuro tampoco me sientan mal, pero… no sé, no sé… será la edad.

2.- UNA CAMISA BLANCA / NEGRA: De nuevo el mismo problema. No es sencillo dar con una con el corte perfecto. En mi caso, por ejemplo, tengo mucha espalda, por lo que en muchas firmas necesito tallas enormes si quiero que la camisa me abroche en el pecho… pero de ese modo me quedan demasiado holgadas en la cintura, incluso demasiado largas en los brazos.

Últimamente prefiero las blusas blancas, vaporosas y sutiles, porque me encuentro más sexy con ellas. Las negras sigo prefiriéndolas algo más armaditas, tal vez porque las combino de otra forma.

3.- JERSEYS DE CUELLO ALTO: Los de punto finito, en colores vivos y en negro, son ideales para el look más clásico, de mujer trabajadora. Los de punto gordito, más sueltos y en colores neutros (verde militar, negro, beige…) son perfectos para un look más trendy y casual.

4.- CAMISETAS: En colores lisos y con diferentes cortes. Incluyo también en el apartado de imprescindibles las camisetas con mensaje y con dibujitos de tipo roquero. Ofrecen dos alternativas geniales: con vaqueros para un look informal, o con falda lápiz negra para un aire más serio, sin resultar arreglado.

5.- FALDA LÁPIZ NEGRA: Imprescindible que no sea demasiado larga para no parecer un taponcito, y que la cintura no sea demasiado alta para no parecer un botijo. Vale también la versión con vuelo o incluso con tablas (mi última adquisición es de Mango, con tablas sólo desde medio corte) que dan un aire más juvenil.

6.- REBEQUITAS DE COLORES: Yo las prefiero de diferentes largos y hechuras, para combinar, pero en los colores no escatimo. Hay cuatro imprescindibles para mi: rojo, negro, blanco y azul marino.

7.- LBD: Otro clásico difícil. Tengo varios, cada uno diferente, y ninguno perfecto. Eso sí, cada modelo requiere complementos diferentes y es adecuado para momentos diferentes.

8.- TACONAZOS NEGROS: El corte es lo de menos. Salones, peep toes, pumps… el caso es que sean negros y que el tacón no tenga menos de 10 centímetros. Le dan un aire sofisticado al cualquier outfit.

9.- CONVERSE NEGRAS: Combinables con todo, o casi todo, para un estilo casual. Valen de otro color, si eres de las que sabe llevar colores encontrados con estilo.

10.- ALGO EXTRAVAGANTE: Da igual el qué. Una falda especial, una camisa diferente, yn vestiod extraño... algo que nadie más tenga -al menos nadie de tu círculo habitual- y que marque un estilo diferente, único, tuyo... no tiene por qué ser una prenda cara, pero sí exclusiva. sirve para momentos especiales, o para reafirmar tu personalidad en un momento de debilidad. En mi caso tengo un par de ellas: una falda con rayas verticales y fajín con rayas horizontales en negro, hueso y beige tostado de una firma inglesa muy poco conocida, una camisa con un estampado imposible en seda que me vuelve loca,... y alguna cosa más.

Si a esto le añades los complementos adecuados (una buena colección de bolsos, pendientes, colgantes, pulseras…) y un par de chaquetas y abrigos, puedes vivir toda tu vida sin preocuparte del “¿qué me pongo?”… aunque luego, desengañémonos, te lo preguntes igual.