PERO… ¿POR QUÉ ME HE COMPRADO YO ESTO?

Venga, sed sinceros, ¿a que os ha pasado muchas, muchas, pero que muchas veces?

Sales de compras, a mirar escaparates, a probarte modelitos, y a dejarte la visa en el intento, y pasas una tarde encantadora, que termina con una cervecita helada en una terracita para dejar descansar los piececillos, exhaustos de tanto trote consumista, y reposar los cientos de miles de bolsas que acarreas.



Luego llegas a casa, feliz y super contenta con tus nuevas adquisiciones, y comienzas a buscarles un sitio en el armario. Todo va viento en popa, hasta que, de una bolsa oscura, venida del reino del Mal Karma Fashion (La Divina dixit) sale una prenda extraña, de un color indefinido, con un corte de lo más extravagante y que, para mayor desazón, no combina ni de lejos con ninguna de las miles de millones de prendas que ya pueblan tu armario.

Despliegas la compra en cuestión en toda su inmensidad, y descubres que se trata de… pues de un error, evidentemente, porque tú jamás te podrás eso… ¿o quizás sí?



Tratas inútilmente de recodar en cual de las doscientas tiendas que has visitado esa tarde has adquirido semejante crimen contra la moda… y al final terminas por darte cuenta. Recuerdas un probador, un batiburrillo de prendas, un espejo de esos que te hacen más delgada (los espejos de las tiendas son siempre así, porque si no no se explica que las prendas que te hacían mega delgada en la tienda te sienten como a un cristo dos pistolas en casa). Recuerdas que cuando te miraste al espejo, te gustó… lo que no recuerdas es por qué.

Decides volver a ponerte el engendro, por si acaso se cumple, por una vez en la vida el axioma ese de “hay que verlo puesto, que es como queda bonito”… pero a ti te parece que lo único bonito de esa prenda en cuestión es que puedes devolverla. La metes en la bolsa y la guardas dentro del armario, decidida a regresarla al lugar del que nunca debió salir…

Pero nunca lo haces. Esa prenda se queda toda la vida en tu armario. De cuando en vez la sacas, en momentos de cambio de temporada o de limpieza de guardarropa, y vuelves a acordarte de que jamás la has estrenado. Puede incluso que todavía tenga la etiqueta.



En mi caso particular, he logrado luchar con éxito contra este tipo de errores, superando mi primigenio e inexplicable terror a las devoluciones. Sin embargo, sí hubo un momento en mi vida en el que acumulé prendas de esta índole en un armario atestado. Recuerdo con especial terror un top en tonos naranjas y verdes con un corte mega extraño que me probé mil veces y que jamás saqué a la calle, porque era imposible combinarlo correctamente, ni tan si quiera llevarlo con dignidad, por la hechura esa tan rara que tenía. Murió sin ser estrenado, después de años –en plural- esperando su turno,

Mi solución personal vino marcada por un cambio de vida –a mejor- que me llevó a reorganizar en profundidad mi armario. De él salieron engendros fashion de lo más extraño que terminaron, o bien en un enrome baúl destino una ONG local, o bien en un enorme paquete con el nombre de mi hermana, que acogió algunos de mis desheredados.

¿Y vosotros? ¿Cuál ha sido la peor compra de vuestra vida?

11 comentarios:

Pide un deseo dijo...

Mi peor compra sin duda la que colgué anoche en mi blog. Es un vestido horroroso que simplemente compré porque costaba dos euros. SE puede ser más ruin?

Además es del mercadillo con lo cual irá directamente a la basura, no lo puedo devolver, porque si pudiera lo habría hecho el mismo día. Para eso no tengo problema.

bsos.

lorena dijo...

La verdad es que nunca me ha pasado eso de comprarme algo y dejarlo sin estrenar!! jamas de los jamases!!

Si es cierto, que abuso de las compras y que casi siempre me suelen gustar las cosas mas especiales y festivas. Que luego para el dia a dia casi no me sirven. He cambiado el chip, y ya no me suele pasar...

Lo que si odio es esas camisetas moniiisimas y ponibles, que en el probador de la tienda no te diste cuenta pero despues de la segunda puesta ves que se te ve media tripa y que te pasas el dia tirando de la camiseta. Conclusion, camiseta incomoda. Aggggg. Sigue en el armario, la miras con recelo porque es moniiiisima pero incomoda a morir.

Besitos

María dijo...

Lola, guapa: ese vestido no es tan terrible, nena, y además, fue tan barato que no debería dolerte nada dedicarlo a la limpieza de los fristales transformándolo en trapos... que salen más caros que el vestiod, según parece, jejeje

Vogue: Esa es otra variante que no he comentado, es verdad. Te compras algo (camiseta, camisa, pantalón, zapatos...) ideal y monísimo, que te seinta de visio... y cuando lo llevas puesto más de 15 minutos seguidos descubres que es LO MÁS INCÓMODO QUE EXISTE!!! Es muy frustrante, porque, como tú dices, tienes la prenda ahí, es ideal, es perfecta... pero es incomodísima!!! Me pasó con una falda (hace años), que me quedaba que te mueres, pero se me remangaba al caminar. al final conseguí domarla soltándole un poquito en la goma de la cintura, y aún me la pongo!!!

Lara dijo...

Lo mejor de estas cosas es que al menos a mi me pasa, luego igual 3 años después las veo con otros ojos y me las pongo!!!
besitosss

Anónimo dijo...

he hecho memoria y me ha pasado varias veces (soy de manias, pero si voy con alguien y me convence... la prenda muere en el armario en perfecto estado y sin estrenar)
me paso con una camiseta de tintoretto, hace cuatro años o asi, era de cuello medio alto, manga larga y con dos aberturas a los hombros, en grises, (me convencieron, lo juro, yo... no queria) y en el probador, bueno... era pasable, siendo pa lo q era (una nochevieja falsa) pos no estaba mal... pero ya en mi casa... dios mio, era corterrima, mierda mierda mierda!!! la estrene esa noche y nunca mas, literal!!
desde entonces no hago casi ni a cristo q baje a darme consejos, como no me entre por el ojo a mi... luego no me lo pongo!!!
pero volvi a caer cuando empece a currar, mi hermana (si, muy clasica ella) me convencio para q m comprase una falda... que de corte era preciosa, en pico, con cintura de esas anchas, hasta la cadera, preciosa, pero de color... de vieja!!! en marrones y grises.
ahi esta, sin estrenar, en el armario!!! y es que no se con que ponermela!!!!! ains!!! si es que no aprendo...
en fin, un desastre, sin falta este finde reorganizo mi armario, voy a dar mil cosas, pq lo tengo a rebosar y al final... solo uso la mitad!!!
un besote

María dijo...

Lara, a mi eso no me ha pasado nunca, ojalá!!!

Aizkora, reorganizar el armario es una terapia genial. Yo, cuando me mudé a donde vivo ahora compre´di que quería tener el armario siempre en orden. ahora tiro todo lo que no me he puesto en los dos últimos años, salvo honrosas excepciones, y cada mes y medio repaso todo por si decido deshacerme de algo. Soy así de rarita!!

Ana García Ordóñez dijo...

yo tambien repaso continuamente mi armario!!! jajaaj lo tiro todo y jamás y digo jamás, he comprado algo que luego no haya estrenado al día o días siguientes si son varias cosas! yo si no estreno rebiento!!! y me suele gustar mucho todo lo que compro. Y todo lo que no compro también, que me cuesta horrores decantarme por algo en concreto jejej. Así me va.

Muakissssssssssss

María dijo...

Malagueña, envidio tu capacidad de comprar correctamente siempre. No sabes lo difícil que se hace a veces.

Lamari, no te preocupes, que a todas nos pasa eso. Lo que pasa es que yo, con lo años, eh llegado a la conclusión de que me gusta más mi gusto que el de la mayoría de mis amigas, y sólo hago caso a algunas muy concretas.

Si te sirvo de personal shopper -a distancia, y con periódicos desplazamientos a la capitas, onos dos o tres al año- me ofrezco desinteresadamente.

Carmeron dijo...

Uff yo lo tengo claro: lo que no haya estrenado durante los 7 días posteriores a su compra... chungo, chungo.

Dos de mis mejores casos:

1) una falda que parece que está hecha con la tela de una mesa de camilla, y encima asimetrica. De Zara, puede tener 3 o 4 años y ahi sigue con la etiqueta. Lo más doloroso es que "obligué" a mi novio a que me la comprara... y claro, imposible descambiarla. a veces me dan ganas de venderla en eBay.

2) una chaqueta de pana roja de Tintoretto. Me la regalaron mis padres por reyes pues no se, por la misma epoca que la falda (en que estaria pensando por entonces), elegida por mi, claro, y les costó un dinerito. La chaqueta en si no tiene nada, solo que entre las leves hombreras y los bolsillos que parecen para meter las manitas como el muñeco Rockefeller el de "que pasa moreno". Me la puse un par de veces por compromiso, y ahí sigue, entrando y saliendo del armario cada temporada...

Ahora soy una yonqui del descambio...

María dijo...

Lamari, no sé por qué, pero intuíta que tú también eras fan del negro.

Perosnalmente creo que es un color con el que es imposible equivocarse. no existen prendas feas en negro (bueno, o parecen menos feas) y a mie personalmente me encanta cómo me sienta (blanquita, pelo oscuro, curvilínea...)

Mis combinaciones preferidas con el negro son:

1.- Jeans y camisa negra
2.- Jeans y camiseta negra en todas sus variantes (tirantitos, manga corta, abullonada...)
3.- Falda lápiz negra y camisa o camiseta de cualquier tipo.
4.- Vestidito negro tipo camisero.

Creo que con esto se puede ir a cualqueir lado.

Anónimo dijo...

yo tb soy muy negra, jeje, vamos blancurria total pero chica, me encanta el negro...
de algo de lo que siempre me arrepiendo es de cuando hago caso a mi novio y me compro la camiseta X en azul (por ejemplo) en lugar de negra... cuando me la pongo siempre le digo algun improperio...
el otro dia vi un vestido negro, cortito, pero con leggins quedaria estupendo, por 20 urelios, y no me lo compre... pq me dijo mi hermana que era raro (si si, mi hermana la clasica) pues aun me estoy arrepintiendo... que hago, voy por el??? si es que me llama!!